PROGRAMA:
- 11,30 h. Pasacalles de gaita y tambor (salida del paxu)
- 11,45 h. Santa Misa (acompañada de gaita y tambor)
- 12,30 h. X Campeonato de siega y cabruñu
Diez segadores de toda Asturias que segarán una parcela de 75 metros cuadrados puntuándose cabruñu, velocidad y calidad de la siega.
Premios de 100 €, 75 € y 50 € a los tres primeros.
- 13,30 h. Subasta del paxu y repartu del bollu
- 14,00 h. Saludo pregón a cargo de Xurde Morán (L’Andariegu)
- 14,30 h. XIX Gran paellada (previa inscripción). Paella, 2º plato, postre y bebida: 12 € socios/ 15 e no socios.
- 16,30 h. Mini-Teatro: Actuación a cargo de miembros de la Asociación Cuídome-Cuídame.
- 17,00 h. Entrega de premios campeonato de siega.
- 18,00 h. Juegos populares para todos: juegos infantiles, carrera de sacos, campeonato de lanzamiento de huevos.
- 19,30 h. Romería con la actuación de “Pin de la Cotolla”.
- 20,30 h. Entrega de premios y rifa de jamón
GANCÉU
El barrio de Gancéu perteneciente a la parroquia de San Esteban de Miravalles, está situado al otro lado del río de La Sota, próxima a los montes de San Blas. Se localiza en torno a la carretera local que parte desde la vía AS-330, Villaviciosa- Puente Agüera, en una desviación entre los kms. 7 y 8, en el barrio de bayones, sobre un cerro que cae por el oeste en los bosques que dan al río de la Magdalena o de La Sota. Se encuentra situada a una altura de 197 m. y por el este parten varias riegas que forman otra mayor llamada de los Navalones y que, entre bosques, va a echarse al río de Los Blancos, que también se llama río Carrión, y por los pueblos de más arriba, cerca de su nacimiento río Ñabla y más abajo río Sebrayu. Desde sus inmediaciones se pueden observar las parroquias limítrofes de Santa Eulalia de Selorio, San Salvador de Priesca, Santa Eugenia de los Pandos, San Antonio de Rales, Santa María Magdalena de los Pandos, San Vicente de El Busto y San Pedro de Breceña, además de la propia a la que pertenece San Esteban de Miravalles.
Ganceu siempre fue conocido por sus animadas fiestas que a lo largo de los años y con la despoblación existente y la correspondiente emigración a los núcleos urbanos (en el año 1968 residían 68 personas y actualmente apenas media docena) fue decayendo hasta llegar casi a la extinción. En el año 1989 se recuperó por un grupo de personas del pueblo para los cual se inició la tradicional Paellada, donde todos los vecinos y amigos, así como cualquiera que asistiera a la misma, podía degustar esta plato en un ambiente campestre y con una serie de actividades que sirven para potenciar la unión entre los asistentes y permitían dotar al ambiente festivos con una buena dosis de cordialidad.
Os invitamos a asistir y comprobarlo.