Paco Viera trae a la plaza de Abastos de la Villa los productos más apreciados del otoño
El otoñó en Asturias es tiempo de sabrosos productos de temporada, que ya se encuentran en abundancia en el mercado de miércoles de la plaza de abastos de Villaviciosa. En el puesto de Paco Viera cuatro son los productos estrella que se han ganado el prestigio y confianza entre la clientela fiel del vendedor. “Ahora mismo traigo castaña Valduna y nueces de Las Regueras, avellanas de Piloña, y faba de la granja en verde de Pravia. Estes fabes ahora tienen mucha demanda porque la piel al ser fresca no se rompe, no la hay que poner a remojo y se puede congelar para todo el año. Vendo todas las que traigo entre los clientes particulares y restaurantes del concejo maliayo”, explica Viera. que comenzó a acudir por primera vez al mercado de Villaviciosa hace casi 20 años
“Siempre vengo a comprar aquí fabes frescas, porque son más fáciles de cocer. Las llevé varias veces y siempre salieron muy buenas. Me gustan por su suavidad y porque me resultan muy sabrosas para hacer la fabada de toda la vida”, explica Fernando Zaldívar Caso, uno de los clientes habituales de este puesto que compraba el kilo a 12, 50 euros
Fernando Zaldívar comprando fabes
Otros de los clientes fieles a este puesto de la plaza, son los maliayeses Rosa Palacio Villabrille y Adriano Ordieres Barro, “Pichi”, que compraban a 3,95 euros el kilo de castañas para ellos y sus nietas. “Venimos a comprarlas para darles una sorpresa a nuestras nietas, Sofía y Clara que son gemelas y su hermana Inés, que casualmente ahora mismo tienen las tres 11 años. Desde bien pequeñas les encantan las castañas que se las preparamos asadas en cocina de leña y están buenísimas. A nosotros y nuestros hijos nos gustan también cocidas con agua y sal, como se comían en nuestras casas desde críos. De cualquiera de las formas tienen un sabor delicioso”, explican los abuelos comprando unas castañas que consideran un alimento sano y “todo un manjar asturiano para tres generaciones distintas”.
Paco Vieria dice ser todo un amante de estos productos tan ricos y simbólicos del otoño asturiano, pero reivindica que castañas, avellanas y nueces no están todavía lo suficientemente valorados, y cree que Asturias tenía que sacar más rendimiento de sus riquísimos frutos. “Es una pena que no se aprecien más estos productos tan emblemáticos de la tierra asturiana, porque tienen mucha calidad. Estos productos tenían que tener un poco más de apoyo, pero el campo está cada vez más abandonado. Incluso se pierden en huertas, fincas, pueblos y montes miles y miles de kilos de castañas, nueces y avellanas porque tienen poca salida”, asegura Viera, recordando que en tiempos no muy lejanos estos productos fueron en Asturias de gran importancia como alimento y para la economía de las gentes de muchos pueblos
Viera también muestra su pesar porque para muchos jóvenes el campo resulte poco atractivo, “ahora la gente joven no quiere volver al campo porque tiene muchas dificultades, habría que cuidar un poco más la tierra y no dejarla de monte. También habría que cuidar un poco más los árboles, porque los de de estos frutos necesitan podarlos, cortarlos… y necesitan un mantenimiento y cuidados que ahora no tienen, y la gente joven de eso no sabe”, explica Viera en el ´ultimo mercado de la Villa, mientras agotaba todos sus productos con el mejor sabor a otoño asturiano