
La marcha nocturna Villaviciosa a Covadonga llena de emoción, deseos e ilusiones
“La Asociación de Amigos de la Cueva de Covadonga”, celebró la edición XXXIX de la marcha nocturna desde La Villa hasta el santuario de Covadonga. Este año fueron 25 aficionados a esta ruta, los que partían el viernes desde el Monasterio de las Clarisas, incorporándose en Arriondas y Cangas de Onís más personas, siendo al final 40 peregrinos los que llegaban el sábado a mediodía a la Santa Cueva
Entre los participantes, además de vecinos maliayeses, se encontraban otros llegados desde, Oviedo, Gijón, Grado, Nava, Pola de Siero, Ribadesella, Sariego. Además de entusiastas aficionados a esta ruta de Santander y Zaragoza que viajaron expresamente para sumarse a la travesía.
Llegada del grupo a Covadonga - En la Santa Cueva con la Santina
Para Violeta Fernández Avín, natural de Nava, la marcha nocturna tenía un significado especial, ya que la realizó por primera vez junto a su hijo Mateo Ornia y su esposa Pilar Sáenz de Santamaría, vecinos de Oviedo. "Es muy emocionante vivir esta experiencia en familia por primera vez. Estoy segura de que será inolvidable por varios motivos. En primer lugar, Covadonga siempre merece una visita. También por la belleza de recorrer el camino de noche, como los esperteyos, disfrutando del paisaje y los pueblos al caer la noche, compartiendo la ruta con la luna hasta el amanecer", expresó con entusiasmo, destacando también el valor de la convivencia con el grupo
Violeta Fernández Avín, Mateo Ornia y Pilar Sáenz de Santamaría, en la salida de Villaviciosa
Por último, explicó otro motivo más personal de su participación: "Un familiar atravesó una enfermedad importante, y en agradecimiento a su recuperación daremos las gracias encendiendo una vela a la Santina en Covadonga”, manifestó emocionada
Los caminantes culminaron la marcha con una visita a la Santina, participando en la Santa Misa, oficiada por el Padre Valdés, dominico de Oviedo, quien ya ha realizado esta ruta en varias ocasiones desde Cangas de Onís. Posteriormente, los peregrinos disfrutaron del tradicional almuerzo de confraternización en el Gran Hotel Pelayo, donde tuvo lugar la entrega de los Certificados de la Marcha
Los 40 peregrinos en Covadonga
Tras una caminata de algo más de 50 km. Ramón García, presidente de la Asociación organizadora, destacó la esencia de esta peregrinación: "Todos compartimos el amor por el senderismo y la devoción a la Santina. Es admirable ver cómo personas de todas las edades disfrutan del camino con los mismos deseos e ilusiones ", señaló, reafirmando el carácter especial de esta histórica travesía.