El nuevo reto de la maliayesa Judith Obaya, atravesar corriendo 1.700 km. por el Desierto del Sáhara
La atleta Judith Obaya atravesará corriendo el desierto del Sáhara Occidental para reivindicar la igualdad de las mujeres en el deporte. Serán 45 km. diarios, durante 38 días, corriendo por las desérticas pistas, enfrentándose a duras condiciones climáticas, hasta completar los 1700 km previstos.
Villaviciosa . Vicente Alonso
Tras haber sido en 2016 la primera piloto femenina que logró hacer esta travesía en motocicleta en total autonomía, y en 2017 la primera persona que la realiza en bicicleta fuera de carretera, en septiembre Judith volverá a Djebel Ouarkziz (frontera natural entre Marruecos y Sáhara Occidental) para iniciar la misma travesía corriendo. Los entrenamientos de Judith comenzaron en junio de 2017. Para conseguir estos objetivos los entrenamientos están siendo dirigidos por el reconocido preparador físico Fernando Azurmendi.
Cuando sólo faltan 3 meses para el inicio de ‘Running the Sáhara’ Judith entrena entre 3 y 6 horas todos días de la semana. Durante los entrenamientos ha ido probando zapatillas, indumentaria y todo tipo de accesorios necesarios para no cometer ningún error una vez comience la carrera en el desierto. “Cualquier rozadura provocada por el calzado, la ropa o el chaleco de hidratación pueden ser fatal y ralentizar o incluso obligarme a abandonar la prueba” apunta la valiente atleta villaviciosina
También está probando los alimentos liofilizados con los que se alimentará. Las comidas y suplementos deben cubrir todas las necesidades diarias de energía y nutrientes
FOTO: Judith entrenando en la Casa de Campo Madrid
Judith sabe muy bien que tan duro como el esfuerzo físico, lo es mental también. “Ahora toda mi vida ahora está centrada en los entrenos. Paso muy poco tiempo con la familia y amigos y apenas me tomo tiempo para divertirme con otras cosas, mi mundo gira en torno a la carrera. Esta dedicación casi exclusiva y tener la fuerza necesaria para continuar cada día a pesar del dolor de rodillas o de las pocas horas de descanso me dicen que estoy preparada y que todo saldrá bien” afirma la atrevida deportista amante de retos únicos
Ésta maliayesa de 50 años sigue trabajando en el turno de noche de la Policía Local de Oviedo, esto le facilita poder entrenar durante el día. Entrena 15 días al mes en su tierra, Villaviciosa, y gracias a los compañeros que le cambian algunas jornadas puede desplazarse otros 15 días a Madrid, La Casa de Campo, para entrenar simulando la travesía a mayor altitud y en condiciones climáticas y terreno más parecidos a lo que se va a encontrar en Sáhara. “Ya he realizado 3 test de resistencia, simulaciones de lo que serán las etapas durante la travesía. Empecé por 7 días de 40 km/día hasta llegar a hacer en el último test 15 días de 45 km/día, corriendo 30 km por la mañana y 15 km por la tarde, parando a medio día que serán las horas de más calor, y comiendo alimentos liofilizados sin gluten tal y como haré allí“
FOTO: Judith entrenando en Villaviciosa
Judith irá acompañada de un vehículo de apoyo necesario, como en la travesía en bicicleta, no solo para el transporte de alimentos y equipo de acampada, si no para su evacuación si fuese necesario, bien por algún accidente o en caso de que hubiera tormenta de agua; las tormentas de agua son torrenciales y en pocos minutos las riadas pueden ser muy peligrosas.
“Sólo espero que mi esfuerzo por llamar la atención de todos hacia la merecida igualdad de la mujer en el deporte sea positivo. Se están consiguiendo muchas cosas, pero aún estamos muy lejos de una igualdad efectiva. Es responsabilidad de todos educar y dar ejemplo, proponer referentes femeninos, facilitar y promover su visibilidad en nuestra sociedad.” Así se manifiesta Judith que también expresa cierta decepción por la escasa repercusión que tiene el deporte femenino en todos los sectores, especialmente en muchos medios de comunicación, apunta finalmente