Historia y arte, arte e Historia forman un todo, un conjunto indivisible por el que nos sentimos unidos como cordón umbilical de nuestra propia madre, a nuestro valle de Valdediós.
Historia como la que formó parte de nuestros antepasados muy lejanos ya incluso en la prehistoria, puesto que recordemos el descubrimiento de los cráneos prehistóricos de Valdedios, las gentes mayores lo recordarán perfectamente porque habrán oído los hechos de aquellos descubrimientos ocurridos en Mayo de 1878, tras quedar abierta por casualidad una oquedad en la parte superior de una bóveda o cueva muy cerca del Conventín, en una aldea que todos conocemos como “el Polleu”, la cueva tenía 14 m. de largo, 6 de ancho y 10 de alto aproximadamente, toda ella llena de estalactitas, se encontraron huesos de animales mezclados con los citados restos humanos.
El arte que atesoran estos contornos, ya lo conocemos, forma parte de una manera esencial del Patrimonio Asturiano.
De los orígenes romanos de Pueyes, recordar, que se llamaba Boides/Boiges (que para ellos significaba “un valle de fuentes”), a lo que hoy llamamos Pueyes, y todos sabemos perfectamente que estamos sobre una enorme balsa de agua en el subsuelo que abarca hasta los montes de Fabares, y cuando hay abundancia ella brota espontánea por todos lados en los 19 manantiales y arroyos que son bien visible en todo el valle.
Aquí, en esta zona, practicaba sus quehaceres religiosos Alfonso III el Magno cuando residía en Boides, su palacio por tanto debía de hallarse en estos alrededores, en algún lugar debería de haber algún rastro o vestigio que donotara la presencia del Rey.
Fue un sacerdote, catedrático, profesor y arqueólogo de reconocido prestigio en aquellos tiempos del Seminario del Colegio de Valdedios, el que buscó en emplazamiento del palacio de Boides en las inmediaciones del lugar en Pueyes, en la primavera del año 1928, lo que le condujo después de consultar varias personas del lugar, al descubrimiento de una “ villa romana” con sus termas incluidas en el punto denominado “Ería de la villa”, sito en el límite de las parroquias del Pueyes y Rozaes a dos Km. de Valdedios, las fotos, textos o reproducciones que se conservan al respecto son bien elocuentes y, se han publicado en algunas antiguas revistas como lo fueron la Revista Valdedios y la revista Covadonga.
La relación en los vocablos Boides-Boiges- Pueyes en muy clara y lo atestigua entre otros documentos un antiguo manuscrito que fue del archivo del Monasterio de Valdedios y que hoy se conserva en el Archivo Histórico Nacional, con las claves sig. 221-B, donde en éste documento se dice: “El coto de Valdedios en que este devoto Monasterio está edificado, es propio suyo solariego...En este dicho coto hay sólo una iglesia parroquial, que es la de San Bartolomé de Pueyes que antiguamente se llamaba de Boiges o de Boides”.
Emiliano Yeguas “Nani”
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