Hasta hace dos décadas al viajar por Asturies se apreciaba su paisaje salpicado de balagares, también llamados varas de herva (hierva) o facines, usados para almacenar la hierva a la intemperie. Miles de balagares se podían ver desde el extremo más occidental al más oriental.. Hay algunos concejos que no tienen hórreos, pero en todos nuestros concejos, año tras año, se realizaban varas de hierva durante los meses de Julio y Agosto.
Muchas personas nacidas antes de los años setenta, al ver este pequeño espacio dedicado al balagar pensaran ¡que tontería!, sin embargo hoy es difícil verlos y nos tememos que desaparezcan de nuestro paisaje en poco tiempo. Es posible recorrer muchos kilómetros por la Asturies rural y no ver más que una sucesión de plásticos de diferentes colores utilizados para ensilar la hierba. Los ganaderos afirman que el ganado la come mejor, conserva sus propiedades nutritivas y su realización es menos laboriosa al ser ensilada con maquinaria agrícola. Una vez más el campo asturiano gana efectividad con las nuevas técnicas aunque a cambio pierde uno de sus valores estéticos y etnográficos, hay que entender que los tiempos cambian y es necesario trabajar con el apoyo de nuevas tecnologías.
Hay un refrán de bastante uso que dice