Una pareja de mirlos sorprenden criando en una vivienda céntrica de Villaviciosa. Las fotos
A los mirlos, “ñerbatos” en asturiano, cada vez es más habitual verlos en calles, árboles, parques, o áreas ajardinadas de las zonas urbanas en busca de comida. Pero lo que no se esperaban la familia Domínguez-Medio de Villaviciosa es que esta primavera una pareja de estas cantarinas aves se decidiera a hacer su nido y criar sus polluelos en la maceta de un rosal en el balcón de su piso, en pleno centro del casco urbano. “Estamos sorprendidos porque es algo que no nos había pasado nunca, y nuestros hijos están emocionados con el ‘feliz acontecimiento’”, declara Begoña Medio entusiasmada con el anidamiento y posterior nacimiento de ‘trillizos’
Manuel Dominguez Medio señalando donde está puesto el nido en la terraza
Ante el inusual acontecimiento en esta familia decidieron desde el primer momento no molestar a la pareja de mirlos para que tuvieran total intimidad y pudieran conseguir sacar adelante sus crías. “No queríamos incordiarles y no volvimos utilizar la terraza ni siquiera para tender la ropa, solo cuando no estaban los pájaros hicimos algunas fotos al nido como recuerdo porque desde niños no habíamos vuelto a ver ninguno”, explican Begoña Medio y Alfredo Domínguez
Nido con la puesta de los tres huevos
La sorpresa comenzó a principios de abril cuando el matrimonio descubrió que macho y hembra estaban haciendo el nido bajo la protección del rosal. “Hace tres semanas pusieron tres huevos, y tras otros quince días de incubación de la hembra nacieron los tres `ñerbatinos’, uno por día. Ahora ya vemos como los alimentan continuamente, la hembra cuida los polluelos y el macho les trae comida, sobre todo lombrices e insectos, de un huerto urbano que tenemos muy cerca. Por eso nos extraña que en vez de anidar en la huerta se hayan decidido por el balcón de nuestra casa, pero igual es que se sienten más seguros y protegidos de depredadores”, aseguran esta familia entre incrédulos y contentos de tener un nido en ‘casa’
Primeros ñerbatinos nacidos
Pero los más sorprendidos de la familia son los hermanos Manuel y Pablo quienes dicen que es el primer nido que ven en su vida, “nos cuesta entender como estos pájaros pueden saber hacer un nido tan redondo y perfecto, solo con pequeñas ramitas y barro, es como una pequeña obra de arte, y los huevos entre verdes y azulados son preciosos. Nos parece casi un milagro que hayan anidado y criado en nuestra terraza”, explican asombrados por el insólito nacimiento de unos ‘ñerbatinos’ a punto ya de emprender su vuelo
Los ñerbatinos nacidos
El ñerbatu cebando las crias
Los polluelos los últimos días bien crecidos