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Este mes de noviembre en el Rincón de los Artistas del Café de Vicente, Charo Cimas presenta una colección en formato cuadro de piezas tipo mosaicos, realizadas con arcilla de manganeso y mallólica.
Bajo el título, Sombras en el Jardín, juega con piezas esmaltadas en sugerentes tonos verdes y energéticos naranjas, en contrapunto a el marrón de la tierra color manganeso.
Estas sutiles piezas cobran vida conformando pequeños paisajes de aire naif.
PREMIOS Y BECAS DE CHARO CIMAS
La artista ha participado en numerosas exposiciones y ganado primeros premios en España, Madrid, Valencia, Zaragoza, Jaen, Oviedo, Avilés y Gijón, entre otras ciudades.
ALGUNAS OBRAS EXPUESTAS
También ha participado en exposiciones colectivas y ferias de escultores asturianos en Portugal, Italia, Francia o Taiwan.
OBRA EN COLECCIÓN DE LA AUTORA
Las obras de Charo Cimas se encuentran repartidas en colecciones del Museo de Sargadelo en Lugo, Museo de Bellas Artes de Asturias, la Colección de Arte Cajastur, en el Museo de Arte Contemporáneo de Varazdin en Croacia y Espacio de Arte Contemporáneo Le Circle Bleu, Metz.
El taller de la ceramista se encuentra en San Pedro de Ambás en Villaviciosa – Asturias.
VERDADES DE CHARO CIMAS
Angel Antonio Rodríguez
Charo Cimas es auténtica. Y esas verdades que atesora la definen sobre otras virtudes (registros expresivos, soluciones plásticas, planteamientos conceptuales) y son la base de su originalidad. Vive, desde hace muchos años, en la Ría de Villaviciosa, alternando el aspecto creativo y la artesanía, la investigación y la didáctica, el reposo y los viajes. Y así, sin prisa pero sin pausa, se ha convertido en una de las artistas más singulares del panorama asturiano realizando, además, importantes exposiciones allende Pajares.
Los trabajos de Charo han evolucionado coherentemente, alternando distintos medios expresivos con la cerámica como piedra filosofal y la escultura, las intervenciones efímeras y la fotografía como eficientes colegas. Aunque barro y fuego son para ella algo más que herramientas, hace años que la “cosa matérica” ha trascendido desde su propia cotidianeidad hacia otros intereses. En las fronteras de la construcción del paisaje, bajo una suerte de land-art documentado con foto-performances, el significado del objeto y el uso de assembleges confirman su compromiso con el entorno y la idea del “campo expandido” de la escultura contemporánea.