Otra vez se termina un año, pues estamos en diciembre, el 2017 se va, pero antes será de nuevo La Navidad. Cambia el ambiente, las noches se llenan de luces de colores, hay gente a todas horas, alguien tararea una melodía, se llena de alegría el entorno.

Buenos deseos, más sonrisas, palabras amables, lo cual hace más agradable la convivencia. El próximo año nadie sabe que nos traerá, pues el Año Nuevo, es siempre como un libro en blanco que sin remedio tenemos que escribir sus páginas día a día.

Que el 2018 nos conceda ante todo salud, pues de ello depende el buen hacer de las obligaciones y trabajos diarios. Con una suave mirada, un por favor, un gracias (que no es tan difícil), todo es más sencillo.

Pongamos cada uno un poquito de nuestra parte, viviendo el día a día lo mejor que sea posible. Pues nos advierte el proverbio, la vida solo es hoy, ayer pasó y mañana aún no llegó y así el transcurrir del año se hará más corto, con sensaciones positivas, disfrutando con los seres queridos lo que tengamos, “más o menos”, pero conformes en compartirlo. Quizá eso sea una buena forma de vida para todos.

Así con los mejores deseos, RECIBAMOS EL 2018. FELIZ AÑO.

ANGELITA REA