“Un domingo de hace algo más de un mes  me  robaron  dos sacos con 50 barras  de pan,  entre baguettes y chapatas” cuenta  con resignación, Rosa García Busto de Alimentación Rosi, detrás de la plaza de Abastos,  “Fue entre las 8:00  y las 8:45 horas  de la mañana, ahora tengo que bajar a la tienda,   antes de las ocho de la mañana a recogerlo” añadiendo, “No creo que fuera para comer, porque hubieran cogido 3 ó 4 barras” 

Las barras y bollos de pan para los pinchos y menús del día, de  una  sidrería cercana al mercado,  fueron  robados hasta tres veces en pocos días. El propietario nos explica, “No me creía que me pudieran robar el pan, la primera vez pensé que se trataba de una broma, ahora lo que hago es recogerlo yo directamente en la panadería”.  El  dueño de otro  bar nos cuenta  “He optado por dejarle una llave de la ventana  del local al panadero que reparte a primera hora,  porque el local se abre más tarde”.

El Ristorante Pizzería Pinocchio,   es otro de los establecimientos que ha sufrido robos de pan.  Su propietario, Gianluca Jacomini “Luca”, nos lo cuenta así “Los fines de semana nos traen una pieza pan de leña de mas de 3 kilos y hace menos de  un mes nos lo robaron en una ocasión, opte por poner  sobre la puerta de entrada una microcámara,  pero finalmente decidí  ponerme de acuerdo con el panadero y me lo deja en el kiosko de prensa de Ana en la plaza,  donde compro los periódicos cada día”. Luca añade, si me pidieran  pan no lo cobraría, pero esto es  la crisis por un trozo de pan”

En lo si están todos de acuerdo,  es que los tiempos en los que la clásica bolsa de pan se dejaba colgada a la puerta de los locales se han terminado. Eso es  lo que recomiendan