A través de los años se suceden los relevos de porteadores, en todas las procesiones.  Esto crea un gusanillo en los pequeños que demandan  llevar un Santo,  y  ayer sábado  se cumplió el sueño de, Miguel, Gonzalo, Diego,  y Diego Mones  que porteaban a una talla en miniatura de San Roque

.La procesión marítima  por San Roque en  el puerto marinero, junto con la  descarga de los fuegos fueron el colofón de un día,  en que Tazones se llena de tradición y disfruta en la noche hasta bien entrada la madrugada.

Hoy domingo San Roquín pondrá broche a los festejos para mañana colocar a Tazones  en parrilla de salida del desembarco

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