El rape o pixín,  como se conoce fuera de Asturias, es uno de los pescados más apreciados del Mar Cantábrico,  y  también en los restaurantes asturianos.  El que llegaba esta misma semana  al puerto pesquero  de Tazones,  capturado  por la embarcación del pescador  Nacho Rivero  fue  todo un récord,  por sus 28 kilos de peso  y más de  metro y medio de longitud.

La enorme pieza fue adquirida por el restaurante local La Tortuga, que ayer lo exhibían a sus clientes de la mano de Nayín Rivero, hijo del pescador y Xicu Díaz responsable del establecimiento.  “Es una pieza espectacular, y uno de los pecados más sabrosos del Cantábrico por su fina carne blanca y sabor a mar. En nuestra carta está siempre,  y a mi es un pescado que me encanta”, explica Maribel Alonso,  cocinera del establecimiento.

La chef  apunta que lo van a preparar a la carta y gustos de  su clientela. ”Se presta a diferentes preparaciones   culinarias. Se puede hacer a plancha, en fritos que se pide mucho, a la marinera,  y  como novedad lo vamos a hacer  a la sidra. De cualquier manera está riquísimo”,  asevera la cocinera, quien añade que con la cabeza del pixín se puede hacer una sopa de muy buen sabor

Nacho Ribero que fue el pescador que lo encontró en sus redes de su embarcación “Bahía de Tazones”.   "Lo pescamos frente al cabo de Lastres y casi no me lo podía creer. Siempre esperas pescar  algún ejemplar grande, pero un pixin de 28  kilos es la primera vez en la vida que lo  pescamos. Fue una alegría que pocas veces tenemos”.  explica orgulloso el pescador sobre  su espectacular  captura

 Tanto el experto pescador, como la cocinera especializada en pescados y mariscos,  aseguran que esta pescado, “es uno de los manjares del Cantábrico”.  

En la foto:  Nayín Rivero y Xicu Díaz exhibiendo el pixín en el resataurante La Tortuga de Tazones