Vicente Alonso

La huerta es el gran hobby de Marino Obaya e Isabel Valdés dedicando la mayor parte del tiempo en su jubilación  a plantar hortalizas, verduras y   legumbres, pero  también nuevas  semillas con las que les gusta experimentar en su plantación de Moriyon en  Miravalles, Villaviciosa

Unos cultivos que ya  han reportado a estos aficionados  a la agricultura grandes  satisfacciones, no en vano sus   fabes de la granja han ganado varios premios, entre otros, en el prestigioso   concurso   de fabes y  fabada para aficionados  de las Jornadas Culturales y Gastronómicas de les Fabes de Villaviciosa

Pero  este otoño la estrella de sus  huertas de La Viña y  La Cueva, son unos  tomates de los  que ya  llevan recogidos más de 150 kilos “Es la primera vez que cosechamos tomates y no   esperábamos ejemplares  tan grandes y tan ricos. Llevamos varias semanas recogiendo piezas   de casi el kilo, pero  el mayor hasta ahora  pesó 1.206 gramos. Hemos tenido una planta que ha dado 31 frutos,  y otra tuvo un ‘piñu’ de 10, todos de casi el kilo”, explican sobre la generosa cosecha y ejemplares   como nunca  antes  habían visto

 Isabel Valdes y Marino Obaya en Moriyon

Orgullosos de sus huertos tan fértiles, que llevan cultivando casi 30 años, y  de  los ejemplares tan hermosos  explican que estos son  de la variedad tomate Rosa.  “El año pasado  los compramos en Monforte  (Lugo),  para plantar las semillas porque nunca antes habíamos cultivado  tomates en la huerta y esta variedad  ha sido todo un descubrimiento. Son  muy   carnosos y con pocas semillas, de sabor dulce e intenso, están riquísimos  y son  perfectos  para ensalada”, aseguran Obaya y Valdés sorprendidos por los resultados de su primera cosecha

Sobre los cuidados de su  cultivo  dicen,  “tenemos una tierra buena a la que le da mucho el sol, abonamos con compostadora y abono natural que se genera en la   propia huerta.   Hay  que mantener el terreno húmedo, pero no mucho, y los frutos hay que tratarlos con muchos cuidados para que  no sufran daños porque tienen una piel muy fina”

Tomates de  kilo en Moriyon, Villaviciosa

Unos tomates  cultivados "al natural" espectaculares de tamaño,  y lo mejor de todo, según estos  cosecheros,  “que saben a tomates”. Aunque empezaron a recoger en verano todavía tienen  más frutos   madurando que   pueden superar en tamaño  los recogidos hasta ahora. “Como los regalamos  entre familiares y amigos ya tenemos casi lista de espera”, dicen con buen humor estos maliayeses aficionados a la huerta