La Villaviciosa monumental en maquetas hechas por Roberto Fernández. Y sus fotos
Redacción VH
Roberto Fernández es un enamorado de Villaviciosa donde nació y vive, y también un apasionado de sus monumentos históricos que recrea en espectaculares maquetas de madera. Una afición que cultiva desde que muy joven trabajó de aprendiz de carpintero con el maestro artesano maliayés Manolo Cuadra, del que dice, “es el mejor tallista que he conocido, seguramente de los mejores que haya habido en Asturias. Con él aprendí muchísimo”.
Teatro Riera, Casa España, y Casa de los Hevia
Un hobby al que solo pudo dedicarse tras su jubilación hace casi dos décadas, pero que por diversas circunstancias había tenido que abandonar varios años. Ahora con el reciente confinamiento por pandemia ha retomado de nuevo su pasión por la construcción de maquetas en madera realizando a escala real algunos de los edificios históricos de la Villa, que sorprenden por su gran realismo.
Teatro Riera y la escultura “La Asturiana de Benluire”
“Durante el tiempo que tuve que estar en casa por la pandemia como me aburría pude volver a mi afición, y en los últimos meses acabo de rematar varias réplicas de algunos de los monumentos más emblemáticos de la Villa: la Casa España, el Ayuntamiento, la Casa de los Hevia, y el Teatro Riera con su plaza y la escultura de la “Manzanera”. Lo próximo que quiero hacer es la Basílica de Covadonga que tengo ya empezada, me llevará un par de meses terminarla”, dice este artista de la madera sobre sus impresionantes obras de arte en miniatura.
Roberto Fernandez con edificios Casa España, Teatro Riera, Casa de los Hevia y en sus manos en Ayuntamiento
Este maquetista autodidacta asegura que este hobby al que se dedica “en cuerpo y alma” le ocupa varias horas al día, “esta es mi pasión y una terapia que me relaja, me mantiene ocupado haciendo lo que más me gusta. Un entretenimiento que casi me hizo olvidar la pesadilla del Covid”. Con 80 años Roberto conserva buena vista y asegura no necesitar gafas para los trabajos, ”Tengo buena visión de cerca y mucha paciencia. Soy muy minucioso al hacer las pequeñas piezas que simulan las piedras, ventanales las tejas de la cubierta, y otros muchos detalles de cada edificio donde las bases están hechas con cartón pintado. Por ejemplo de la Casa de los Hevia casi me gusta más por detrás que por delante”.
Sus herramientas para trabajar son el cúter, la regla, compás, tijeras, formones, cepillo …y dice reproducir sus obras a partir de fotografías a tamaño real del monumento a realizar. Para lograr el mayor realismo también sale a ver el edificio que está haciendo donde ver los pequeños detalles in situ, alcanzando así sus maquetas una total similitud con el edificio original, y gran perfección en los detalles de cada pieza terminada.
Casa de los Hevia
Pero este maquetista autodidacta también ha hecho obras de marquetería, en las que ha recreado escenas cotidianas de Villaviciosa, como las fiestas del Portal, la Semana Santa, esculturas como «La Exaltación de la Manzana», y monumentos como el Conventín de Valdediós o la Iglesia de la Oliva, entre otras, que han llegado a diferentes ciudades españolas. Unos artísticos trabajos por los que ya ha sido reconocido por la Asociación de Amigos del Paisaje de Villaviciosa (Cubera), “por su admirable obra hecha con un cariño hondamente sentido a Villaviciosa”, dice el diploma de distinción
Pero los mayores admiradores de las obras de este artesano dice que están en su familia, “la primera mi mujer Ángeles, de la que recibo todo el apoyo y a veces me ayuda, y nuestros hijos Francisco y Manuel me alientan con esta afición. También mis dos nietos, Samuel que vive en Madrid ya me ha pedido que le haga el Castillo de Manzanares El Real porque está cerca de su casa, y Marcos que vive en Oviedo quiere que le haga la Catedral de Oviedo. Para mí son dos importantes retos. Todos ellos me dicen que no se me ocurra vender estás maquetas porque para ellos son auténticas obras de arte”.
Curiosa imagen de la Casa de los Hevia por detrás
Aunque hasta ahora este artista maliayés nunca había expuesto sus obras, desde esta semana se pueden ver en un espacio de El Pasaje, para que los maliayos puedan conocer también de estas preciosas “joyas arquitectónicas de Villaviciosa”.
Roberto Fernández trabajando en la Basílica de Covadonga