Tras tres años de parón a causa de la pandemia la Asociación de Villaviciosa  Amigos de la Cueva de Covadonga recuperó  este fin de semana  la popular marcha al  real sitio.

Nieves Lorenzana y   Emilio Moreno llegaron desde Zaragoza

Fueron casi una treintena  los participantes que hicieron la hermosa ruta   con   salida   la noche del  viernes  desde el monasterio de las Clarisas de la Villa. Tras la llegada  ayer  a Cangas de Onis  se sumaron algunos familiares  a la expedición para peregrinar  a  Covadonga. En la marcha además de vecinos de Villaviciosa, se encontraban  aficionados a esta ruta llegados desde Llanera, Oviedo,   Lugones, Nava, Sariego o Gijón. De   Zaragoza también estaban  Emilio Moreno y Nieves Lorenzana que llevan 12 años realizando la marcha, «es una ruta maravillosa y una  experiencia inolvidable  cada año nos hace venir a  Asturias», decían a la llegada a la Villa. Por primera vez participaron  también varios  miembros de la familia ovetense “Rubio”, el abuelo Adriano de 82  años explicaba, «teníamos  una promesa de ir a visitar la Santina y hacerla las tres generaciones juntos», aseguraba con su  hija y nietos

Familia Rubio de Oviedo  Pablo Muñoz,  Adriano  Rubio, Irene Montes y María Rubio

Tras la llegada  a Covadonga asistieron a  la Misa  en la Santa Cueva oficiada por el dominico Padre Valdés,  donde   se recordaron a los socios fallecidos en los últimos años. Los peregrinos    celebraron   el tradicional  almuerzo  de confraternización en el Gran Hotel Pelayo  con entrega de  distinciones anuales.  Recibieron diplomas todos los participantes y  el “bastón rotulado”  de la Asociación Amigos de la Cueva de Covadonga,  Natalia Moris de Gijón y Julio del Valle de Oviedo, que llevan haciendo esta ruta más de cinco años

“Es una satisfacción  retornar a Covadonga  con tantos amantes de la naturaleza y de las rutas a pié. Y otra   poder volver a cumplir  una tradición   que ya  va por  37 ediciones”, dicen desde el colectivo  en el broche final a la jornada con la foto de familia en la Santa Cueva

Julio del Valle de Oviedo   y Natalia Moris de Gijón galardón “bastón rotulado”

Fueron casi una treintena  los participantes que hicieron la hermosa ruta   con   salida   la noche del  viernes  desde el monasterio de las Clarisas de la Villa. Tras la llegada  ayer  a Cangas de Onis  se sumaron algunos familiares  a la expedición para peregrinar  a  Covadonga. En la marcha además de vecinos de Villaviciosa, se encontraban  aficionados a esta ruta llegados desde Llanera, Oviedo,   Lugones, Nava, Sariego o Gijón. De   Zaragoza también estaban  Emilio Moreno y Nieves Lorenzana que llevan 12 años realizando la marcha, «es una ruta maravillosa y una  experiencia inolvidable  cada año nos hace venir a  Asturias», decían a la llegada a la Villa. Por primera vez participaron  también varios  miembros de la familia ovetense “Rubio”, el abuelo Adriano de 82  años explicaba, «teníamos  una promesa de ir a visitar la Santina y hacerla las tres generaciones juntos», aseguraba con su  hija y nietos

Tras la llegada  a Covadonga asistieron a  la Misa  en la Santa Cueva oficiada por el dominico Padre Valdés,  donde   se recordaron a los socios fallecidos en los últimos años. Los peregrinos    celebraron   el tradicional  almuerzo  de confraternización en el Gran Hotel Pelayo  con entrega de  distinciones anuales.  Recibieron diplomas todos los participantes y  el “bastón rotulado”  de la Asociación Amigos de la Cueva de Covadonga,  Natalia Moris de Gijón y Julio del Valle de Oviedo, que llevan haciendo esta ruta más de cinco años

“Es una satisfacción  retornar a Covadonga  con tantos amantes de la naturaleza y de las rutas a pié. Y otra   poder volver a cumplir  una tradición   que ya  va por  37 ediciones”, dicen desde el colectivo  en el broche final a la jornada con la foto de familia en la Santa Cueva