Cubera entregó su premio y distinciones 2017. Ver galardonados y todas las fotos del acto
El premio ‘Aldea más Guapa’ 2017 de Cubera fue para la Asociación Cultural y Festejos Puente San Xuan d’Amandi. También reciben distinciones el grupo de Facebook ‘Fotos Antiguas de la Villa’, el Oficio tradicional de “vendedoras” en los miércoles de la plaza, y Alfonso Martínez, “Fon” zapatero artesano.
La entrega de premio y distinciones tuvo lugar este martes en el Teatro Riera, que se vio lleno para la ocasión, con una nutrida presencia, sobre todo de vecinos de Amandi, cuya Asociación Cultural y Festejos Puente San Xuan d’Amandi que vrecibía el premio ‘Aldea más Guapa’ 2017
El acto dio comienzo con la presentación de la revista número 50 de Cubera, (ver inferior noticia) con la exposición de los contenidos del número, y una retrospectiva a la evolución de la publicación desde 1984. A continuación tuvo lugar la presentación del calendario 2018 de Cubera y el perfil profesional del ilustrador, Mino Cerezo Barredo. El discurso de la Presidencia de Cubera (se puede leer completo en esta noticia)
Cubera también repasó la memoria y valoración de las actividades desarrolladas durante el año. Y se dio lectura del acta de la asamblea con las distinciones y el premio, con intervención de los galardonados, que se mostraron muy emocionados y agradecidos por los reconocimientos de Cubera, Asociación de Amigos del Paisaje de Villaviciosa
El acto contó con la presencia de autoridades locales entre las que se encontraba el Alcalde de Villaviciosa, Alejandro Vega Riego , quien felicitó a los galardonados
ENTREGA DE RECONOCIMIENTOS DE CUBERA
Premio “Aldea más guapa de Villaviciosa”: La Asociación Cultural y de Festejos Puente San Xuan d’Amandi
La Asociación Cultural y de Festejos Puente San Xuan d’Amandi nace en 2013 con la intención de recuperar las tradiciones festivas y el espíritu de pueblo que los tiempos modernos habían ido arrinconando. Desde entonces hasta hoy han conseguido dar nuevo aire a las tradicionales fiestas de San Xuan con las que desde hacen décadas abrimos el calendario festivo del verano en el concejo; han consolidado la recuperada fiesta del Carmen en el mes de julio y han vuelto a celebrar la festividad de la Virgen de los Remedios en octubre.
Disponen de local social en las antiguas escuelas y lo han llenado de vida a través de encuentros vecinales y cursos de todo tipo, entre los que nos llama de atención y nos llena de envidia el taller de restauración de la colección de cabezudos de la que el pueblo puede presumir desde hace muchas décadas.
Entre una cosa y otra, unas cuantas familias de Amandi están comprometidas con la asociación y entre todos participan de la idea de hacer un pueblo unido y mejor; un proyecto del que nos gustaría formar parte y al que nos adherimos con la concesión de nuestro título anual de Aldea más Guapa de Villaviciosa.
En la foto: José Antonio Fernández, presidente de la Asociación Cultural y Festejos Puente San Xuan d’Amandi, y el Alcalde de Villaviciosa, Alejandro Vega Riego
Distinción, “Oficio tradicional de vendedoras en los miércoles de la plaza”
En mundo que de vez en cuando descubre que lo más viejo vuelve a estar de moda porque se trata de valores fundamentales, queremos reconocer el papel que han venido desempeñando desde tiempo inmemorial tantas mujeres del concejo (y algunos hombres) que mantienen vivo el mercado de los miércoles, que dan calor al centenario Mercado de Abastos con sus productos de la huerta, que nunca dejaron de apostar por la vida saludable que ahora llaman Slow food, Kilómetro 0 o productos de proximidad. Lo que nosotros conocimos siempre como “de casa”. Que su espíritu siga vivo por los miércoles de los miércoles.
EN LA FOTO: Recogieron el premio en representación de las vendedoras de la plaza, por la izquierda tras Angel Valle, Vicepresidente de Cubera, Pilar Ballines de Puelles, Queti Crespo de Llavares, Belén Huerta y Antonio Blanco de San Martin del Mar, y Mercedes Alvarez y Mario Costales de Candanal
Distinción “Grupo de Facebook Fotos antiguas de la Villa”
El grupo de Facebook Fotos antiguas de la Villa es un espacio on line cuyo objetivo es compartir imágenes antiguas de Villaviciosa. En la actualidad cuenta ya con más de 2200 miembros y genera permanentemente intercambio de información acerca de la identidad de vecinos o familiares de generaciones pasadas, o de rincones y acontecimientos curiosos de nuestra tierra. Desde el principio básico del respeto entre los miembros, sus administradoras están consiguiendo que Internet nos ofrezca un instrumento para el recuerdo y el disfrute.
En el centro de la foto, Catalina y Quety Cueto del grupo de Facebook Fotos antiguas de la Villa
Distinción Alfonso Martínez, “Fon” zapatero artesano
Acontecimientos como el quinto centenario de la visita histórica de un personaje ilustre, que llegó a convertirse en el soberano más poderoso del planeta ha sido objeto de atención por parte de las administraciones, de instituciones académicas y de asociaciones culturales de diversa índole, que han intentado estar a la altura de las circunstancias. Pero también ha sido objeto de interés por parte de profesionales que, a título individual, ofrecen su conocimiento a la comunidad, hacen partícipes a los demás de la satisfacción que le supone su propia herramienta de trabajo.
Es en este contexto en el que entendemos la iniciativa de Alfonso Martínez, Fon, orgulloso zapatero artesano y descendiente de zapatero. Su curiosidad le ha llevado, en primer lugar, a preguntarse por el objeto de su trabajo, el zapato que podría haber calzado el rey Carlos cuando pateó nuestras calles; su profesionalidad, después, le ha permitido reproducir un modelo acorde a la moda de la época y ajustarlo al pie de nuestro actual emperador Víctor Berros, actor del Grupo de Teatro Contraste.
En la imagen, a la izquiera directivos de Cubera y Alfonso Martínez, “Fon” zapatero artesano
Enlace inferior a galería fotográfica de todo el acto
https://photos.app.goo.gl/UtJSNmHwQglmDzlL2
Discurso de la Presidencia de CUBERA
Leído por Angel Valle
Diciembre de 2017
Señor alcalde, señor presidente,
Señores y señoras concejales, socios y socias de CUBERA,
Amigos y vecinos
Buenas tardes
Desde que en 1985 otorgáramos a Solares el primer titulo de Aldea Más Guapa de Villaviciosa han pasado 33 ediciones en las que, año tras año, la asociación Amigos del Paisaje de Villaviciosa, Cubera, ha tratado de mantenerse fiel a su compromiso con la conservación y promoción del patrimonio, de los valores culturales de nuestro entorno, ya sea a través de nuestra acción directa, ya sea a través de la acción de nuestros convecinos, cuyas iniciativas reconocemos y avaloramos con estos premios y distinciones.
Es también el momento en el que, tras recibir la aprobación de la asamblea de socios la pasada semana, hacemos memoria, balance de un ejercicio que estamos a punto de finalizar.
Era este 2017 el año de Carlos, de aquel príncipe de Gante que pasó por Villaviciosa hace exactamente 500 años a medio camino de convertirse en rey ya autoproclamado en Bruselas y con la vista puesta en el Imperio que heredaría muy pocos años después.
Para contextualizar la celebración de aquella visita organizamos desde Cubera un ciclo de seis conferencias que se fueron espaciando en el tiempo, desde noviembre de 2016 hasta agosto de 2017. El ciclo tenía la intención de acercar al público en general la época en la que se encuadra la llegada de Carlos I a la península ahora que el quinto centenario nos devolvía tal evento a la memoria.
Por esa razón, las charlas se propusieron con una finalidad ante todo divulgativa para que los contenidos resultaran cercanos a todo tipo de público, aunque no por ello exentas del rigor académico o de investigación. El calendario se programó con la oportuna coordinación que merecían otros actos paralelos que fueron surgiendo en nuestra villa, puesto que esta y otras iniciativas se pusieron sobre la mesa de la comisión municipal para la coordinación de los actos relacionados con esta conmemoración. Agradecemos esta iniciativa municipal y confiamos en que sea modelo a seguir para un aprovechamiento más racional de los esfuerzos que tantas entidades culturales y ciudadanas realizan en la Villa y el resto de las tierras de Maliayo.
Cubera ya había participado en el año 2000 de la conmemoración del V centenario del nacimiento de Carlos V con la emisión de unas tarjetas postales y el número 12 de la colección Cuadernos, que recogía un trabajo de Etelvino González titulado Carlos I en Villaviciosa. En esta ocasión, diecisiete años después, el documento ha sido actualizado en su contenido, revisado en su diseño y publicado en color. Nuestra asociación asumió la reelaboración de los materiales y la edición de los 500 ejemplares que los socios recibían en sus casas a comienzos del otoño, pero al mismo tiempo el Ayuntamiento de Villaviciosa amplió la edición en otros 1500 ejemplares que está distribuyendo de manera promocional en el marco del año carolino que se iniciaba en Tazones y Villaviciosa el pasado 19 de septiembre y concluirá el 15 de mayo de 2018 en Valladolid.
En el apartado de publicaciones, hemos cumplido con nuestro compromiso de editar un cuaderno y una revista anuales. El cuaderno hace el número 28 y estuvo dedicado a los vecinos nuestros que participaron en las diferentes campañas de la Guerra de Granada entre los años 1482 y 1492. El trabajo es fruto de la investigación de Rodrigo Álvarez Brecht, un joven investigador que leía con éxito este mismo año su tesis doctoral y que quedó vinculado a esta tierra a través de los premios de investigación que Cubera empezaba a convocar en 2012.
La revista, como habrá quedado claro a estas alturas del acto, ha llegado a su número 50 con el empeño de mantener el equilibrio y el rigor de sus contenidos, y con la suerte de incorporar nuevas firmas con un goteo mantenido que le otorga plena vitalidad.
Esa vitalidad que, cambiando de tema, tanto echamos en falta en nuestra ría. Día arriba, día abajo, se está cumpliendo ya un año desde la penúltima grave avería en el porréu de la Marquesa y todas nuestras preocupaciones y las de tantos otros vecinos son poco más que una pataleta infantil ante la desidia de las administraciones que tienen la responsabilidad y la capacidad para resolverlo. Un espacio cerrado al marisqueo que extiende ahora esa inactividad a cualquier otra ocupación humana en los rellenos de sus márgenes. Habíamos ido perdiendo con resignación unos cuantos porreos que carecían de actividad; luego fuimos añadiendo agua a espacios humanizados o incluso edificados; ahora tenemos que echar al ganado y al ganadero a cambio de nada.
En los primeros meses de este año convocamos actos públicos de debate y exposición de los deferentes puntos de vista que se platean ante este grave problema y decidimos recurrir a la figura del Defensor de Pueblo porque consideramos que el asunto es un claro ejemplo de maltrato por parte de las administraciones hacia sus administrados. Así parece haberlo entendido este organismo de defensa del ciudadano, pues aceptó a trámite nuestra reclamación de amparo. Poco más hemos conseguido; en el mes de junio tuvimos las últimas noticias suyas, en las que nos informaba de que quedaban a la espera de respuesta por parte de las administraciones a las que habías requerido. Como recogemos en la revista, la Consejería de Infraestructuras, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente deriva la responsabilidad hacia la Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales. Al parecer, la Demarcación de Costas de Asturias ya habría enviado la documentación solicitada por el Defensor del Pueblo, pero seguimos esperando por la Consejería y sufriendo el permanente deterioro.
La ría de Villaviciosa no es un espacio único, por mucho que nosotros así lo consideremos, y tampoco lo son sus porreos. Si la vega baja del Nalón es una huerta, ¿por qué no lo es la nuestra? Nuestros mayores se hartaron de recoger fabes de todo tipo y “carraos” de manzana en los porreos que ahora vemos anegados. “A perrona el cestu”, aquellos mismos mayores fueron llenando de tierra fértil los suelos que ahora el agua de nadie llena de basura, troncos y salitre sin que los responsables tengan siquiera una mala noche de sueño. Nos gustaría conocer las razones, y hasta nos dejaríamos convencer si fuera el caso, pero de momento tenemos muy claro que ni las personas, en primer lugar, ni las especies animales y vegetales que los habitaban obtienen de este cambio tan radical del espacio beneficio alguno. Y si todo se remite al tópico simplón de devolverle al mar su territorio, cuidado no aspire quien eso decide a cambiarse también el traje y la corbata por un sencillo taparrabos por aquello de ser consecuente con su filosofía ambiental.
Pese a tan reiterados desplantes, CUBERA sigue fiel a su compromiso y se anima, pese a todo, ante iniciativas como la que ponía en marcha el pasado curso el Colegio San Rafael: una semana de interpretación del medio natural para sus cursos de 3º y 4º de la ESO.
Con la implicación de profesorado de diferentes materias y la colaboración de CUBERA en los aspectos que el centro educativo consideró oportuno, han desarrollado un proyecto de investigación con el que el alumnado y el conjunto de la comunidad educativa se familiarizaba con valores como la tolerancia, la solidaridad o la preservación y el cuidado del medio ambiente, con el fin de aspirar a un cambio de actitud a favor de la motivación y la participación activa en la mejora y protección no solo de la ría de Villaviciosa, sino también del patrimonio artístico y cultural de la villa.
En esa misma línea de positividad y de trabajo a favor de la comunidad se enmarcan nuestras distinciones y nuestra Aldea más guapa 2017. No estamos hablando en ningún momento de que los galardonados sean los mejores en una competición contra otros candidatos que se quedan por el camino. Simplemente, ponemos el dedo señalando hacía iniciativas dignas de reconocimiento y modelo de actuación para todos nosotros.
A continuación, la secretaria de la asociación, Delia Piris, dará lectura a los acuerdos de la asamblea anual que refrendó por unanimidad las propuestas presentadas y les irá solicitando que accedan al escenario para recoger el diploma acreditativo.
Revista Cubera numero 50
Breve historia
En enero de 1984, media año después de que la asociación quedara constituida, veía la luz el primer número esta revista. Con toda la ilusión de los primerizos, se llevó a Madrid para presentarla en el Centro Asturiano y no faltó quien, con toda la buena voluntad del mundo, proponía retos que consideraba lamentablemente difícil de alcanzar: ¡A ver si vemos el número 5!
Y a ello se pusieron los responsables la publicación en aquellos primeros tiempos. Lo hicieron “con tantu enfotu” que tenían en la calle el número 4 antes de que se acabara el año. Era una publicación ágil, que se cocinaba en la “carpetina” de Miguel el del Pasaje y llegaba a casa de los socios como el mejor de los regalos. Han pasado 33 años y el regalo sigue llegando a los socios, últimamente por Navidad, como los buenos turrones.
Entre aquel ejemplar y este de ahora hay todo un tesoro de anécdotas, documentos, reivindicaciones y cariño por la tierra de Maliayo. Y desde luego un admirable elenco de colaboradores, porque la revista de Cubera optó desde las primeras páginas por solicitar las colaboraciones que más podían aportar en cada momento y sobre cada materia. Más de 270 autores diferentes han firmado trabajos en esta publicación, lo que da una idea del amplio ámbito de influencia que ha logrado generar a lo largo de estas tres décadas, a mitad ya de dos siglos.
Después de aquel primer año con cuatro números sucesivos, el ritmo de publicaciones se fue ajustando a las posibilidades reales de la asociación. No era cosa de publicar un folletín, sino de reunir los materiales de los que verdaderamente pudiera sentirse orgullosa la asociación. Se pasó por tres y por dos números durante los años finales del siglo XX, si bien la mayor periodicidad iba compensándose con un número más elevado de paginas. A partir de 2001, las revistas toman carácter anual y desde hace ya varios años se ha fijado el volumen en las 80 páginas.
La Voz de Villaviciosa
Ya acompañaba a aquel primer número una separata que nacía con la voluntad de recuperar una vieja cabecera periodística, la del semanario local La Voz de Villaviciosa que se publicaba hace ya cosa de un siglo. Para esas cuatro u ocho páginas de distribución simultánea pero físicamente separada se reservaron siempre las noticias de actualidad más relevantes del periodo a cubrir, que como ya decíamos ha ido variando con el paso de los años. Es la publicación fedataria de acontecimientos singulares como el que hemos tenido la suerte de reseñar en este número 50: un premio Princesa de Asturias no llega a Villaviciosa todos los días y desde Cubera nos hace ilusión compartir experiencia con los vecinos de la asociación La Capilla de Poreñu. Para el cajón de “papeles de guardar” hemos preparado esta Voz con los discursos pronunciados en La Fontalina el pasado octubre por todos los protagonistas del histórico evento.
El número 50
A ellos dedicamos también, como un guiño no argumentado, la portada de este número. El pegollu viejo y arrugado en lugar de trasmitirnos sensaciones de vejez o decadencia nos hace llegar toda la fuerza de su función: soportar la estructura de una tradición y generar bajo ella un cobijo.
En páginas interiores mantenemos las secciones que vienen siendo tradicionales, con mayor o menor desarrollo, sin alterar la constante de reseñar en ellas las actividades de la asociación a lo largo del año, desde la asamblea de fin de año anterior hasta el otoño del año en curso.
En el bloque que hemos dado en llamar Historia Local nos acercamos a la época de Carlos I, sin caer en un monográfico sobre el tema, para ofrecer una panorámica de la población de esta tierra a partir de los censos de 1528 o la curiosidad que pueda despertarnos la figura de Alonso Manrique, el capellán del Carlos príncipe que llega a Villaviciosa, cuya vida y familia da para un manual de la literatura española de la época.
Damos cuenta también de la novelesca vida de un vecino de El Bustiu en el siglo XVIII que, pasado el tiempo, ha dado lugar a que en un municipio de Filipinas se celebrara este año por primera vez el Día de la Amistad España-Bustos.
Las páginas de la Crónica no podían ocuparse de muchas más cosas sin antes hacerse eco del nombramiento de dos Hijos Predilectos de Villaviciosa tan vinculados a esta asociación, Etelvino González y Agustín Hevia, cada uno en su ámbito y grado de responsabilidad. Además, coincidiendo con el tan mentado centenario hemos creído oportuno también prestar atención al contexto en que se fragua el monumento de El Ancho al desembarco de Carlos I, por lo que dedicamos unas páginas a su autor, el escultor bejarano Francisco Macías, y al acto propio de su inauguración que se hizo coincidir con los actos de la celebración del VII centenario de la Carta Puebla de Maliayo.
Calendario 2018
Hemos renovado este año la iniciativa que poníamos en marcha el pasado ante la grata acogida que ha tenido por parte de nuestros consocios. Si el año pasado Monchu nos hacía el honor de ilustrar un calendario de Cubera para 2017, que muchos de nosotros guardaremos como oro en paño por mucho que digan que se le acaban las páginas, en esta ocasión hemos tenido la fortuna de disfrutar de otra gratísima colaboración sobre la que confieso tanta admiración por la obra como desconocimiento sobre la persona. Desconocimiento que nos comprometemos a paliar porque es de justicia y porque creemos que todos los villaviciosinos tienen el derecho de sentir orgullo de sus vecinos más ilustres.
Maximino Cerezo Barredo es un religioso claretiano que se ordena sacerdote en 1957 y es conocido como el pintor de la Liberación por su compromiso como misionero próximo a la Teología de la Liberación, a partir de su experiencia vital en América Latina durante más de 30 años.
Cerezo Barredo, Mino, nació en Villaviciosa en 1932 y vivió aquí el tiempo justo para su formación inicial en los colegios de San Rafael y San Francisco. De nuestras calles se lleva recuerdos que permanecen hoy en su cabeza y una inquietud pictórica y creadora que le lleva a formarse en las Escuelas de Bellas Artes de Valencia y Madrid. En esta última, la de San Fernando, ejercerá después como profesor de Arte Sacro.
Sus primeros pasos como artista de reconocimiento los da en Filipinas en 1968, en la catedral de Isabella, provincia de Basilán, con un mosaico mural de 90 metros cuadrados y una gran vidriera. En 1970 se traslada a la Misión de Juanjuí, en el Perú, donde comienza a dudar si su vocación artística era compatible con el servicio a Dios. Afortunadamente, el cura-pintor mantiene su doble compromiso y desde entonces sus murales, sus mensajes y sus personajes críticos y reivindicativos ocupa lugar preferente en decenas de iglesias, capillas y albergues en toda Sudamérica, España e Italia, al menos.
En el calendario 2018 hemos seleccionado obra suya que va desde detalles de alguno de sus murales americanos a obra mucho más reciente, más en la línea de la abstracción. Se alternan técnicas y soportes, tamaños e inspiraciones, pero se mantiene el espíritu inquieto y comprometido de un villaviciosino que reside actualmente en Salamanca y no deja de trabajar.