¿Cómo y cuándo llegó al Lealtad? Llego al club hace cuatro temporadas gracias a la confianza y oportunidad que me da Pedro, el presi, al cual estaré siempre agradecido. También influyó mucho la confianza del míster para que siguiese esta temporada.

¿Asiste a entrenamientos y partidos, totalmente involucrado con el primer equipo? Sí, cuando me comprometo a algo me intento involucrar lo máximo.

¿Qué es lo que hace exactamente en el día a día con los jugadores? Mi labor consiste en realizar cualquier tipo de masaje que necesiten, ya sea a nivel muscular o de calentamiento.

¿Cuál es la práctica más habitual que emplea con los jugadores? Sobre todo después de los entrenos, masajes de descarga, y los días de partido hay algunos jugadores que les gusta algo de calentamiento en la musculatura.

¿Cómo es la comunicación con el cuerpo técnico para seguir los protocolos con los jugadores lesionados o que requieren tratamiento? Solemos hablar de todas las dolencias que hay,  y después a nivel de clínica tenemos la suerte de confiar con la ayuda del fisioterapeuta ovetense Diego R. Granda, que nos facilita mucho las cosas en cuanto a diagnostico, tratamiento y plazos. Yo intento complementar su labor con masaje.

¿Cómo está viviendo esta experiencia profesional con el Lealtad? Con ganas y mucha ilusión. Siendo de aquí es un orgullo poder colaborar con el club.

Recientemente abrió su propia sala en Villaviciosa, ¿compagina trabajos de sala con trabajo de campo? Sí, lo estoy compaginando. Intento poner mis citas en horarios que no coincidan con los entrenos, aunque a veces no es posible.

¿Confía en seguir trabajando con el Lealtad en 2º B? Ojalá sea así. Este grupo por esfuerzo, trabajo y compromiso merece conseguir el objetivo de seguir en esta categoría.