Cubera devuelve a la luz al cronista que buceó en el pasado de la Villa
La Casa de los Hevia acogió la presentación del cuaderno Cubera que la asociación Amigos del Paisaje de Villaviciosa dedica a Ramón Rivero, el “cronista de la Villa como él mismo firmaba muchos de sus escritos.
El volumen hace el número 26 de su colección Cuadernos y recoge una selección de artículos inéditos de un estudioso local que desarrollo su vocación investigadora y de recopilación durante más de medio siglo, aproximadamente a lo largo del segundo y tercer cuarto del siglo XX. Ramón Rivero sigue en la colección a las figuras de Ramón del Valle (autor del siglo XIX-XX) y Pedro Antonio de Peón Duque de Estrada (siglo XVIII), estudiadas en los dos títulos precedentes.
Ángel Valle, como vicepresidente de la asociación promotora del acto y de la publicación, dio la bienvenida a los asistentes, en su mayoría socios y seguidores habituales de las actividades de Cubera, y se encargó de presentar y agradecer su presencia en la mesa a José Manuel Marugán Rivero, familiar del autor objeto del estudio, y a Miguel González Pereda, autor de la selección y del estudio propiamente dicho.
Aprovechó también la ocasión para dejar constancia del agradecimiento de la asociación a la Fundación Princesa de Asturias por haber elegido precisamente a esta entidad, premio Pueblo Ejemplar de Asturias 1991, como objeto del trabajo escolar que concluía esta semana con la publicación en la Wikipedia de la entrada “Cubera”, en un acto en el que estuvieron presentes los fundadores de la propia enciclopedia digital. “Es un honor que la Fundación haya puesto sus ojos, una vez más, en Cubera y es también una muesca más en el grado de compromiso de quienes aquí estamos para con la entidad y para con la sociedad villaviciosina que es nuestro objeto de trabajo”, aseguró Ángel Valle.
José Manuel Marugán, villaviciosino al que la distancia de su domicilio habitual no le impide vivir los acontecimientos de la Villa como un vecino más, hizo memoria de la figura de su tío materno, de su estrecha relación familiar y de un buen número de anécdotas que nos refrescaron de nuevo la imagen de aquel funcionario del Ayuntamiento que ocupaba sus horas entre papeles tratando de sacar a la luz la Villaviciosa que ya a él se le iba quedando atrás.
El detalle de sus publicaciones corrió a cargo del autor del estudio que ahora ve la luz, Miguel González Pereda, otro de los villaviciosinos que toma orgulloso el relevo de Ramón Rivero como investigador y divulgador del pasado local. En su intervención dio cuenta de la dificultad que entrañó la selección de artículos para esta edición entre una obra ingente y desperdigada en la que se mezclan ediciones parciales o poco conocidas, revisiones, borradores.
La obra inicia la selección con las Nuevas Semblanzas de personajes populares de Villaviciosa, que escribió en verso entre 1923 y 1948, y se cierra con dos artículos de sus serie Antiguallas Villaviciosinas, escritas alrededor de 1966, en las que da cuenta de las noticias sobre la exclaustración de los monjes franciscanos en el siglo XIX o de las desventuras de la imagen de la Virgen del Portal con motivo de la ocupación francesa en 1812.